
Cuba y la República Árabe Saharaui Democrática han mantenido históricas relaciones de amistad, hermandad y solidaridad, desarrolladas en el tiempo y que continúan consolidándose en la actualidad. El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, principal artífice de los históricos lazos que unen a ambos pueblos, en su discurso pronunciado en la sesión de clausura de la VII Conferencia Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, en Nueva Delhi, India, el 7 de marzo de 1983, expresó: «La República Árabe Saharaui Democrática y el Frente Polisario cuentan con nuestras simpatías y nuestra solidaridad».
Para profundizar en estos entrañables vínculos y cómo continuar fortaleciéndolos, especialmente a nivel interparlamentario; el miembro del Buró del Secretariado Nacional del Frente Polisario y Presidente del Consejo Nacional Saharaui, Sr. Hamma Salama, ofreció una entrevista exclusiva al equipo de prensa de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en el marco de la jornada por el Día de África el pasado 25 de mayo.
¿Cómo valora las relaciones entre la República de Cuba y la República Árabe Saharaui Democrática (RASD)?
–Las relaciones históricas entre la República Árabe Saharaui Democrática y Cuba se basan en principios revolucionarios comunes y en la defensa del derecho de los pueblos a la libertad, el anticolonialismo, la autodeterminación e independencia, y a la construcción de un mundo de igualdad, donde prevalezcan la paz y la justicia.
«En consecuencia, son relaciones muy sólidas que surgen de la profundidad y el espíritu de los ideales comunes de los dos pueblos amigos. Estos vínculos se han traducido a través del fuerte respaldo político de Cuba, en el seno de las Naciones Unidas, al inalienable y legítimo derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia; además del apoyo de su país en la educación y la sanidad con misiones médicas y educativas en la República Árabe Saharaui Democrática para contribuir a aliviar la situación de nuestro pueblo.
¿Cómo pueden seguir fortaleciéndose esos entrañables vínculos bilaterales, especialmente en el ámbito interparlamentario?
–Hay esfuerzos significativos para fortalecer las relaciones entre los dos países y, al más alto nivel, los vínculos cubano-saharauis se caracterizan por la coordinación bilateral y la consulta sobre diversos temas de interés común.

«A nivel del Consejo Nacional, se estableció el Comité de Amistad Cubano-Saharaui para extender los puentes de cooperación y acción conjunta con el objetivo de servir a los dos pueblos y sus aspiraciones para un futuro mejor.
«El pueblo cubano goza de mucho respeto y consideración a nivel de todas las instituciones de la RASD. Las relaciones con el Estado cubano han evolucionado en varios campos y los horizontes aún son prometedores con vistas a continuar desarrollando estos importantes vínculos con un país estratégico y fundamental como Cuba.
¿Qué importancia tiene el Grupo Parlamentario de Amistad en la consolidación de las relaciones entre nuestros pueblos? ¿Qué hitos fundamentales destacaría de su funcionamiento?
–No hay duda sobre la importancia de estimular la diplomacia parlamentaria, que se ha convertido en un papel importante en la política exterior de nuestro país, y puede contribuir a fortalecer y consolidar la política exterior del Estado saharaui con muchos países. Es un factor básico y complementario para la diplomacia oficial para lograr los objetivos por los que estamos luchando.
«Esto requiere que desarrollemos métodos y un trabajo conjunto con la Asamblea Nacional cubana para alcanzar estos objetivos, e iniciar el camino para el intercambio de visitas parlamentarias y Comités de Amistad y para consolidar la asistencia en varios foros internacionales; activando el trabajo de los parlamentarios entre los dos países y coordinar la participación en coloquios parlamentarios globales, proporcionando condiciones para el éxito de la red legislativa internacional para la solidaridad con el pueblo saharaui.

Usted y el Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de la República de Cuba, Esteban Lazo Hernández, intercambiaron recientemente, en Windhoek, en el Funeral de Estado del Padre Fundador de la Nación Namibia y primer Presidente de la hermana República de Namibia, Dr. Sam Nujoma. ¿Qué trascendencia tuvo ese intercambio para el fortalecimiento de las relaciones interparlamentarias?
–Fue un encuentro fructífero. Le agradecí por las posiciones de principios de Cuba, por su apoyo a la justa causa saharaui y abordé con él la importancia de la coordinación conjunta con varios parlamentos latinoamericanos y caribeños de formar un frente unificado para defender los derechos de nuestros pueblos y enfrentar los desafíos reinantes hoy en el mundo como consecuencia de las guerras y las violaciones de las leyes internacionales a las que están expuestos los pueblos del Tercer Mundo y el saqueo de sus recursos naturales, como el caso del Sahara Occidental, que es un refelejo evidente de esta realidad colonial.
¿Cuál es la postura del Parlamento de la República Árabe Saharaui Democrática ante el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos contra Cuba y la reinclusión de nuestro país en la espuria lista de supuestos Estados patrocinadores del terrorismo?
–El Parlamento saharaui tiene la misma posición oficial del Estado saharaui, al lado de Cuba, al rechazar el injusto bloqueo al que está sometido su país. Exigimos el levantamiento de este injusto e ilegal bloqueo que provoca consecuencias al heroico pueblo de Cuba.
¿Cómo valora las relaciones entre Cuba y el continente africano?

–Creo que Cuba es inspiración para muchos países africanos, con su experiencia revolucionaria única y su apoyo a los pueblos africanos frente al colonialismo. A pesar de la distancia, está bien cerca de los corazones de los africanos, y esta historia de lucha compartida ha fortalecido la posición de Cuba en el continente africano, donde se profesa un gran respeto y aprecio por su nación.
«Cuba respalda, con su labor humanitaria, a los diversos pueblos africanos, y sus universidades se abren a los estudiantes africanos, además de tener sólidas relaciones diplomáticas con los países influyentes en el continente.
Finalmente, su mensaje al pueblo cubano…
–Las relaciones, que están arraigadas entre nuestros dos pueblos, nos dan la garantía y la confianza de que el pueblo saharaui ganará en la lucha sin tregua hasta alcanzar la soberanía y la paz, y alcanzará sus objetivos en la libertad y la independencia, porque los pueblos que se mantienen a su lado, en su legítima lucha, son muchos en África, América Latina, Asia y en el mundo.
«Quiero enviar un mensaje fraterno al Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y a todos los miembros del Parlamento y, a través de ellos, a todo el hermano y heroico pueblo de Cuba.
« ¡Qué vivan los pueblos hermanos saharaui y cubano!
«Y gracias a usted por este gesto y atención a la situación que vive el pueblo saharaui».
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